Día de Todos los Santos
Autor: Mary Carmen
Fecha: 30/10/2010
Creo importante hablar de ese sentido de trascendencia, de religiosidad grabada en el corazón de los hombres y que desde siempre ha dado origen a venerar en todos los países a los seres que se han ido. La tradición de asistir al cementerio para rezar por las almas de los seres queridos, está...
...acompañada de un profundo sentimiento de devoción, donde se tiene la convicción de que el ser querido que se marchó pasará a una mejor vida, etc., sin ningún tipo de dolencia, como sucede con los seres terrenales. Es el día que más flores se vende.
Para nosotros, aunque sabemos que nuestros seres queridos gozan de la Paz del Señor, nos parece que debemos hacer acto de presencia; cuando observas nichos que no tienen flores en ese día, piensas, tal vez equivocadamente, que una persona vive mientras vive en el corazón de sus seres queridos, en mi caso vive hasta que me vaya con él, al Padre. Y considero que poner unas flores es signo de recuerdo y vivencia trascendente.
En Fundación Juan Bonal desde la Madre Rafols y Juan Bonal, son muchas Hermanas que en estos 200 años han precedido lo que todos añoramos: han pasado a vivir sin penas ni tristezas, Amor de eternidad, Cristo les dio la vida y les recibió en amistad, porque su destino es vivir, siendo felices con Cristo, sin padecer ni morir.
El Día de Todos Los Santos es una solemnidad cristiana instituida en honor de Todos los Santos, conocidos y desconocidos, según el papa Urbano IV. En los países de tradición católica, se celebra el 1 de noviembre; mientras que en la Iglesia Ortodoxa se celebra el primer domingo después de Pentecostés; aunque también lo celebran las Iglesias Anglicana y Luterana. En ella se venera a todos los santos que no tienen una fiesta propia en el calendario litúrgico.
En Francia, la gente de todos los rangos y credos decora los sepulcros de sus muertos en el Jour des morts.
En México esta celebración se combinó con elementos indígenas y del sincretismo, resultó una original celebración en el Día de Muertos, distinta de las otras naciones católicas. En las zonas andinas de sudamérica, especialmente en Ecuador, Perú y Bolivia, la costumbre es preparar e intercambiar entre familiares y amigos las guaguas de pan para consumir con la chicha morada que en algunas áreas rurales son también ofrendas principales en los cementerios.
Estas tradiciones son más que una cristianización de antiguos ritos paganos, como los que los antiguos celtas celebraban, de la que derivó el Halloween, tradición que sigue siendo mantenida en los países anglosajones; mientras que la celebración religiosa no lo es. La vigilia, sin embargo, coincidía con la celebración pagana de Samhain el 31 de octubre, ahora llamado Halloween (nombre que proviene de la frase "All hallow's Eve" o "Víspera de Todos los Santos" entre los anglosajones), que marcaba el final del año celta. En esta fecha se celebraba entre los antiguos, la apertura dimensional entre el mundo tangible y el mundo de las tinieblas. Y que no tiene que ver con la fiesta cristiana de Todos los Santos.
Y esa tradición va desde las piedras en el cementerio de Jerusalén, a los hermosos cementerios de Egipto, más grandes y mejores que muchos cobijos, en un país con muchos que duermen en las salidas del aeropuerto.
Nosotros veneramos y recordamos de una forma muy especial a nuestros seres queridos que nos han precedido en el signo de la fe. En estos días nos acordamos especialmente de cada uno de ellos, y nuestra visita, es la muestra de nuestro amor y cariño para ellos. Tal como han vivido, estamos seguros que están salvados y que gozan de la paz del Señor.