Procuro Mantener la Ilusión por las Cosas
1.- D. Amado, ¿Cómo ve la economía en estos momentos?
La economía española está inmersa en una etapa de ajuste, tras quince años de crecimiento continuado. Todos conocemos los efectos de la crisis: incremento del desempleo, menor actividad en las empresas, caídas de la Bolsa, etc. No obstante, la etapa más prolongada de crecimiento de la historia que acabamos de vivir nos aporta más recursos que nunca para afrontar las “vacas flacas”. La suma de esfuerzos entre Administraciones Públicas, empresas, entidades financieras y agentes sociales será fundamental para salir de esta situación. Además, después de varios meses con noticias únicamente negativas para los hogares, en las últimas semanas hemos constatado que la inflación ha cedido, y seguirá disminuyendo puesto que el petróleo cotiza a la mitad de precio hoy que en julio, y los tipos de interés están reduciéndose también. En síntesis, abordamos un período complicado, con dolorosos efectos sobre el empleo, pero que seremos capaces de reconducir.
2.- ¿Cree que esta crisis tan profunda es labor de todos combatirla?
La crisis, que tuvo sus comienzos hace dos veranos en Estados Unidos con la generalización de los impagos en las hipotecas de alto riesgo (subprime), se ha extendido a todo el mundo por el efecto de la globalización. Hoy todos los mercados están interconectados. Por eso la solución tiene que ser global. Ya ha habido una primera reunión del G-20, donde se han sentado las líneas estratégicas para combatir esta crisis. La Unión Europea aprobará un programa de obligado cumplimiento para todos los países miembros. Además, están las medidas de choque que cada gobierno ha adoptado en función de la situación particular de cada país y las actuaciones coordinadas de los principales bancos centrales.
3.- ¿Qué labor deben realizar en estos momentos la Entidades como las Cajas?
Las cajas vendemos confianza, un valor especialmente importante en estos momentos. El cliente de una caja sabe que su dinero está en buenas manos, porque nosotros somos entidades solventes y que analizamos muy bien el riesgo de cualquier operación. Por eso, nuestro deber es seguir financiado a nuestro público de toda la vida, como son el mercado de familias, las pymes, los profesionales y jóvenes, junto con la prestación de un servicio profesional, próximo y con la máxima agilidad. Además, tenemos que seguir ejerciendo de palancas en el desarrollo regional invirtiendo, como lo estamos haciendo, en proyectos que dinamicen el tejido industrial. Donde las Cajas no pueden estar, porque no lo han estado nunca, es en proyectos en los que ni hay equipo de gestores ni tienen viabilidad, porque pondríamos en peligro nuestra solvencia.
4.- Como persona con gran sensibilidad y responsabilidad ¿cómo la afrontaría?
Indudablemente, en estos momentos hay que acordarse de la gente que pierde su empleo y de los colectivos sociales excluidos que, en periodos de recesión económica, tienen más dificultades. Recientemente, se podía leer en la prensa que aumenta un 40% la demanda de ayuda a Cáritas. Este aumento en las peticiones de ayuda está relacionado de forma prioritaria con la asistencia para poder pagar la hipoteca o el alquiler, encontrar trabajo o regresar a los países de origen en el caso de los inmigrantes. Todas las medidas a favor de reforzar la cobertura a los colectivos con más dificultades de inserción laboral, así como ensanchar e incentivar las nuevas contrataciones, especialmente de los jóvenes, son bienvenidas.
5.- Respecto a su tarea de presidente ¿qué destacaría de ella?
Es un gran honor presidir esta entidad de ahorro fundada por la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País hace ya 132 años. En alguna entrevista he afirmado que me gustaría que se dijera que durante el tiempo que he estado como presidente, Ibercaja ha sido una entidad necesaria y útil para la sociedad. Queremos seguir siendo fieles a nuestros principios fundacionales, de lo que me siento especialmente orgulloso.
6.- La Obra Social y Cultural de Ibercaja colabora con nuestra Fundación para la construcción de una escuela e internado en la India, apoyo que agradecemos profundamente, porque gracias a él se beneficiarán no sólo 600 escolares matriculados, sino toda la zona de Kallathipura. ¿Cómo le hace sentir esta generosidad?
El subdesarrollo se combate con educación y cultura, y por eso nuestra Obra Social va de la mano con las ONG´s ejemplares que trabajan en el Tercer Mundo. Tienen experiencia y también capacidad de gestión y seguimiento de programas y proyectos, para que esas ayudas se destinen a los fines previstos y sin posibles desviaciones. Esta labor es encomiable y nuestra Caja no es que sea generosa, es que cumple con su vocación de ser necesaria y útil a la sociedad con acciones como ésta.
7.- Fundación Juan Bonal destina recursos a la atención de la infancia, salud, educación y atención a la mujer, tercera edad, desarrollo agropecuario y catástrofes en los cinco continentes. ¿Qué opinión le merece este destino?
No tengo palabras para los que trabajan a favor de los demás, con una generosidad sin límites. Además, en muchos casos sacrifican parte de sus vacaciones para trabajar codo con codo con la población local en el despegue o funcionamiento de los proyectos de cooperación en estos países. España es una de las naciones del mundo con mayor número e implicación de voluntariado de las ONG´s en planes de desarrollo en Latinoamérica, Asia y Continente Africano.
8.- ¿Cómo cree que está la situación de la infancia en el mundo?
Todos los esfuerzos que se están haciendo a favor de la infancia son loables, pero insuficientes. En cualquier conflicto, los niños son quienes más sufren, sobre todo en las llamadas guerras olvidadas. También la comunidad internacional tendría que ser muy beligerante en el combate de dos lacras que existen mayoritariamente en el Tercer Mundo y en ciertas zonas de los países emergentes como son la explotación laboral de los menores y el mercado sexual de este colectivo.
9.- ¿Qué es a lo que a nuestro Presidente le gustan de los niños?
Mire, yo soy padre de cuatro hijos, ahora ya mayores, pero, obviamente, demuestran que a mi me gustan los niños. Y qué me gusta de ellos, pues la plasmación de que todos formamos parte de una cadena a la que el nuevo eslabón otorga varias emociones: la ilusión que trae consigo un niño, el afán de superación a que nos obliga su presencia para intentar que tengan lo mejor en lo material y en lo emocional, y, por supuesto, ese amor que no espera nada a cambio y que a todos nos hace mejores.
10.- Le conocí siendo un joven encantador, generoso y servicial, cuya vivencia recordamos muy profundamente. ¿Qué le queda de aquel muchacho?
Pues procuro mantener la ilusión por las cosas. En mi familia, para que mis hijos salgan adelante y sean personas de bien; en mi trabajo, para cumplir ese objetivo del que he hablado antes de presidir una Caja que sea necesaria y útil a la sociedad. Y en lo demás, pues transmitir que si alguien me necesita para algo, pues que aquí estoy.
11.- Desde su visión personal y profesional, ¿qué valores considera prioritarios en la educación y cómo debemos hacer posible para mejorarla?
Son los valores universales de la libertad, el respeto, la convivencia con los demás, la generosidad y solidaridad. Con respecto a cómo mejorar la educación, siempre he sido partidario de llegar a consensos para abordar las futuras reformas con toda la comunidad educativa y superar ese mal endémico de los gobiernos españoles de que cada uno que llega suprime lo hecho por el anterior y elabora su propia ley. En vez de mirar hacia delante, no hacemos más que ponernos zancadillas a nosotros mismos.
12.- ¿A qué se debe que cada vez seamos más insensibles a los problemas de los países en desarrollo?
Yo no ceo que eso sea así. Es verdad que las grandes urbes se han deshumanizado, con lo cual se pierde el trato del día a día, incluso con el vecino de tu misma comunidad. Pero a la vez, en un mundo globalizado como el que nos toca vivir, la información sobre los desastres de esos países se conoce en tiempo real y cada vez hay más organizaciones bien preparadas trabajando a pie de problema. Con el añadido de que donde antes sólo había religiosos ahora hay también población civil. También es cierto que la “espectacularización” sucesiva de las catástrofes a través de los medios de comunicación puede llegar a insensibilizar a la población pero, con todo, desde el momento en que más gente sabe lo qué sucede, más gente se preocupa y ayuda en lo que puede.
13.- ¿Qué argumentos utilizaría para convencer a una gran audiencia para que se haga colaborador de la Fundación, un problema que ahora nos preocupa, apoyando proyectos o bien escolarizando a un niño?
Apelaría a la sensibilidad de las personas y a esa satisfacción tan profunda que se siente cuando se comprueba que un proyecto de primera necesidad sale adelante en alguno de estos países. En el caso de Aragón, tenemos además allí a una auténtica heroína como la hermana Primi Vela, paisana que ha puesto en marcha con una eficacia admirable varios centros de enseñanza y residencia, y que es todo un ejemplo de cómo multiplica los pocos recursos que le llegan.
14.- Como presidente de Ibercaja, con una gran responsabilidad. ¿Piensa, a pesar de la crisis, incrementar las ayudas acciones solidarias?
En los últimos años se ha incrementado sustancialmente el presupuesto de la Obra Social y Cultural. En estos momentos de crisis y con unas necesidades nuevas, hemos apostado por incrementar la opción asistencial de nuestra Obra Social frente a otro capítulo importante también como es el cultural, entre otros. También estaremos y apoyaremos todas las actuaciones de las autoridades nacionales o regionales para combatir la crisis, especialmente para apoyar a las personas que puedan entrar en desempleo. Eso no mermará nuestra colaboración con los países en desarrollo, que se mantendrán en las condiciones presentes. Somos conscientes de que si en Occidente hay crisis, qué no estará pasando en países que aún no saben qué es el bienestar.
Le deseamos muchos éxitos en su magnífica tarea en Ibercaja, como Presidente.
Muchas gracias por su labor y por su tiempo.
Amado Franco Lahoz
Presidente de Ibercaja